domingo, 1 de noviembre de 2009

Autopsias electrónicas (IV): un monitor

Retomamos esta sección, que tenia algo abandonada, y no por falta de material.

En la autopsia de hoy, trataremos de averiguar la causa de defunción del monitor de tubo que se me fundió hace dos semanas.

Como comenté hace un par de entradas, me encontraba terminando de escribir una cuando la mitad derecha de la pantalla se pagó, y una fumata blanca empezaba a emerger de la parte trasera. Así que la apagué, la desenchufé, y me la llevé. Más tarde, me decidí a probarla de nuevo, y me la encontré así:

Tras comprobar que no tenia intención de volver a funcionar, comencé la autopsia. El primer paso fue obviar este aviso (no lo hagáis en casa) y asegurarme de tocar el destornillador solo por el mango de goma (por si las moscas...).

Lo primero que se ve al desmontarla, además de un montón de pegatinas en koreano, es que un vulgar monitor "Hyundai" en realidad es marca Samsung, como muestra la pegatina grande que está pegada en un lateral.

En cuanto a la causa de defunción, encontré algo quemado el inicio del tubo. Por lo demás parecía bastante... sucio.

Pero bueno, yo creo que para ser un monitor que me encontré por ahí de segunda mano de hace años yo creo que ha superado las expectativas. Además, así me decidí por fin ha comprarme una nueva pantalla a juego con el ordenador, una Packard Bell de 19' formato 16:10, que si de por sí ocupa menos que la otra, además lleva los altavoces integrados. Es decir, ahora vuelvo a tener sitio en la mesa para trabajar. xD

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